A través de una carta remitida al presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, el titular de la Conferencia Episcopal Paraguaya, Monseñor Adalberto Martínez Flores remitió una carta manifestando “solidaridad y cercanía” a Monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa (Nicaragua) quien sufre la persecución y el asedio de las autoridades.
“Confiamos plenamente que la Iglesia nicaragüense tendrá la fortaleza suficiente y logrará unir a su pueblo a través del dialogo y la paz. Felices los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios” (Mt 5,9)”, dice parte de la carta.
El arzobispo de Asunción condena “cualquier tipo de violencia, atropellos, ataques y censura en contra de la Iglesia” y recalca que “son hechos que quebrantan los principios básicos del estado de derecho”.
Finalmente, pide la intercesión de la Inmaculada Virgen María. “A los obispos y a todo el pueblo nicaragüense, les aseguramos nuestras oraciones y acompañamiento espiritual y pedimos la intercesión de la Inmaculada Virgen María, reina y madre de todos los nicaragüenses, para que pronto se restablezca la convivencia armónica y reine la paz”.
Posterior a esta carta, la Conferencia Episcopal de Nicaragua confirmó la irrupción de la Policia en la Sede Episcopal de Matagalpa, llevándose consigo con la fuerza a Mons. Rolando Álvarez y otros, supuestamente, ocho religiosos y un laico. Posterior a eso, en un reporte, la policia comunicó que Mons. Alvarez permanece en resguardo domiciliar en la Ciudad Capital.